Me enamoré de un cuadro suyo por Facebook y terminó siendo mío, gracias a sus facilidades. Me lo envió de Canarias a Tarragona y llegó en perfecto estado. Ahora disfruto de una auténtica obra de arte que derrocha amor y divinidad. Soy fan. Seguro que no será el primer cuadro que me lleve de Aday. Gracias Aday por tu dedicación!!!